Los niños premiados, además, participan de un festejo de confraternidad con niños de todo el departamento y su cuento se publica en un libro.
Acá publicamos algunos de los cuentos presentados por los alumnos.
El cumpleaños que más recuerdo ….
El cumpleaños que más recuerdo fue el de este fin de semana. En verdad fue este viernes y era el cumpleaños de la hermana de mi mejor amiga. Había un castillo inflable y era muy grande. Me acuerdo que una vez casi me caigo y me quiebro la pierna...pero por suerte no me pasó nada. ¡Una de las cosas que me asustó mucho fue que cuando estaban desinflando el castillo inflable una amiga de la cumpleañera se quedo adentro y no podía salir! Todos estábamos asustados, hasta que finalmente logrò salir. Pero después que salió, se desmayó y tuvieron que llamar a la ambulancia. Después de media hora se despertó. A todo esto esto la mamá de la cumpleañera llamó a la madre de la niña que estaba desmayada. Después, cuando todos se fueron, mi hermana y yo nos quedamos a dormir, y estuvo muy bueno porque miramos un montón de películas. Al día siguiente nos teníamos que ir a las cinco porque teníamos muchas cosas que hacer en mi casa... pero... yo no me quería ir!!! Al final, me tuve que ir y la chica que se desmayó, se recuperó. Cuando estaba leyendo para mi casa vimos algo muy raro. Había un auto chocado y una chica con un chico pidiendo ayuda. Cuando llegamos a mi casa prendí la tele para ver si decía algo. Con mi familia nos quedamos sorprendidos porque los que chocaron estaban jugando carreras con otros amigos e iban demasiado rápido y chocaron. Ese día me quedé asustada. Me gustaría que la gente tome conciencia de esto.
Soleado
Mi bicicleta y yo
Después de varios días de lluvia se me ocurrió salir a dar un paseo en mi bicicleta, mi gran amiga.
Era un día lindo de sol y salí por un caminito que me llevaba por la zona rural de mi ciudad. En el camino me crucé con unas vacas que me miraban desde un campo, más adelante vi unos árboles de naranjas, paré y aproveché a comer algunas, mmm qué ricas estaban.
Venia disfrutando mucho de la naturaleza y de repente me di cuenta que estaba en medio de una zona de barro, mi bicicleta comenzó a andar cada vez menos, ¡que susto! Tenía barro por todos lados, la cadena no giraba, estaba en problemas pero a lo lejos vi un arroyo y caminé hasta él, con mucho cuidado metí mi bici en el agua y así poder sacar el barro de ella.
El sol se estaba yendo, la tarde terminaba y regrese a mi casa con mucho barro en mi ropa, en mi pelo y en mis botas pero muy contento de mi gran paseo con mi amiga la bicicleta.
Jere manya 5to año
Una nube negra se levanta en el horizonte y...de repente si hizo la noche. Era uno de esos días de verano en que el sol puede derretirte como un helado. Mi primo Joaquín vino a pasar unos días en las vacaciones desde Montevideo y como vivo en el campo, se divierte mucho conmigo porque hacemos muchas cosas que él no hace en la ciudad, como andar a caballo, en bici, jugar al fútbol, bañarnos en la piscina y todas esas cosas.
Eran las siete de la tarde y habíamos terminado de hacer unos arcos y flechas cerca del monte acacias; se me ocurrió la idea de armar una carpa para pasar la noche en el fondo de casa y mostrarle las estrellas que tan linda se ven desde el campo. Le pedí permiso a mamá y con la ayuda de mi tío comenzamos a armarla.
Estábamos tan entretenidos que cuando terminamos vimos que una nube negra tapó el sol por completo y de repente empezó a llover. Joaquín y yo estábamos tan ansiosos por dormir en la carpa que no podíamos creer que el tiempo nos arruinara la idea.
En ese momento mamá nos llamó para cenar y mientras comíamos la lluvia paró.
Cuando salimos nos pusimos muy contentos al ver que solo había sido una tormenta de verano. Las nubes desaparecieron y el cielo se llenó de estrellas, después de un rato vimos una estrella fugas y pedí como deseo que para el próximo verano Joaquín pueda venir mas días.
Camito 5to año
¡Qué raro! Por mi casa pasa...
Un día en pleno invierno, pasó por enfrente de mi casa un hombre de como cuarenta y cinco años. Vestido todo de negro, con un sombreo gris y zapatos de baile marrones oscuros. Tenía una mirada baja, como si estuviera enojado con alguien. Caminaba muy rápido y siempre con la mirada baja. Hasta que en un momento levantó la mirada y me miró, yo me escondí debajo de la puerta. Y cuando me levanté haber si seguía, ya no estaba más, salí a ver si se había escondido y lo vi que estaba corriendo. Decidí seguirlo, fue difícil, lo seguí mas o menos una hora y media, hasta que paró en un bar; yo entré también y me senté muy disimuladamente en la mesa de al lado. Me pedí un café y escuché que estaba hablando con un señor aún más raro que él, se llamaba Ignacio y parecía que estaban haciendo un trato. Luego los dos se retiraron y yo los seguí. Ignacio se fue pero el hombre de negro se quedó, yo me acerque y le pregunte cómo se llamaba, él me dijo, me llamo Martín y se fue corriendo antes de que le pudiera decir mi nombre y presentarme. Me fui corriendo y me dije entre dientes, este tipo es muy raro y empecé a seguirlo nuevamente. Esta vez fue por dos horas, hasta que lo alcancé y le dije -para, te he estado siguiendo durante tres horas y lo único que he descubierto de ti es que te llamas Martín. El señor se empezó a reír con maldad y le dije ¿qué te pasa? ¿por qué te ríes así?, él respondió, ¿acaso te importa? Y tengo una pregunta ¿por qué me has seguido?. Yo dije te hice una pregunta . Me río así porque vos me has seguido durante mucho tiempo sin razón, solo porque uso ropa negra e hice un trato con un señor, tengo cuarenta y siete años. Uso ropa negra porque vengo de hacer una obra y en ella soy un detective y al final todos bailamos, por eso los zapatos. La mirada baja es para que no me reconozcan los fans del teatro. El trato con el señor raro fue porque quería que actuara en el cumpleaños de su hija y corría porque vos me perseguías y me gusta que me persigan por mucho tiempo. Ya te dije lo que pasaba, ¿estas contenta?. Ahora le dije avergonzada, lo siento mucho de verdad, prometo que nunca va a volver a pasar, lo juro. Él me perdonó y nos hicimos buenos amigos.
Gide93 5to año
Qué raro por mi casa pasa Luis Suárez...
Cuando me estaba bañando y mi mamá dijo: Leooo está Luis Suárez, apague la canilla, me vestí y bajé. Le dije:
-¿Tú eres Luis Suárez?
-Sí, yo soy Luis Suárez.
-Ay que bueno.
-¿Te quieres quedar a tomar mate?
-Bueno dijo tomo algunos mates y voy a jugar un poco con Leo al fútbol.
-Pero Luis Suárez apúrate.
-Espera un poco- me dijo.
-Sí yo espero, pero te hago una pregunta: -¿Dónde están tus hijos?
-Están en un cumpleaños dijo y ahora dentro de un rato los paso a buscar.
-¿Dónde están tus autos o cuantos tienes?
-Yo tengo 4 coches 2 en España y 2 en Uruguay.
-¿Y que coches son?
-Y acá en Colonia tengo un Lamborghini y un Ferrari.
-Qué bueno cuando tengas un partido de fútbol y hagas un gol dame una camiseta.
-Sí como que no.
Vinieron unos amigos,Ezequiel y Guido, y lo atomizaron a preguntas. Después no me quería regalar la camiseta.